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Leopardo persa

  • Foto del escritor: Flores Marcelino Vanessa
    Flores Marcelino Vanessa
  • 13 may
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 13 may

El leopardo persa (Panthera pardus saxicolor), también conocido como leopardo del Cáucaso o leopardo de Asia Occidental, es una subespecie del leopardo común. Pertenece a la familia de los felinos y destaca por ser una de las subespecies de leopardo más grandes del mundo.


Características


·       Su cuerpo mide entre 1,26 y 1,83 metros de largo, con una cola de 94 a 116 cm.

·       Altura y peso: Llega a medir hasta 76 cm de altura en la cruz y puede pesar entre 68 y 70 kg.

·       Cráneo y dientes: El cráneo del macho puede alcanzar los 25 cm, y sus colmillos superiores miden entre 6,8 y 7,5 cm (ligeramente menores en las hembras).

·       Pelaje: Su color varía con la estación. En invierno, tiene tonos grises claros, con manchas negras parduzcas en forma de rosetas. Algunos tienen un tinte rojizo o arenoso.

·       Dimorfismo sexual: Los machos son notablemente más grandes, con una estructura más robusta y musculosa.


Hábitat y Distribución


El leopardo persa prefiere vivir en entornos con vegetación densa como matorrales, bosques de hoja caduca y praderas subalpinas. Evita zonas con nieve abundante y raramente se ve en áreas muy pobladas o llanuras. Se puede encontrar en lugares como Irán, Afganistán, Armenia, Georgia.


Alimentación


El leopardo persa es carnívoro y su dieta está compuesta principalmente por ungulados como:

  • Jabalíes

  • Cabras salvajes (Capra aegagrus)

  • Ovejas de montaña

  • Muflones

  • Gacelas

  • Ciervos

También consume presas menores como liebres, puercoespines, roedores, aves, y reptiles. En ocasiones excepcionales puede atacar ganado doméstico o incluso humanos, aunque esto es muy raro hoy en día.

 

Reproducción


El leopardo persa no tiene una temporada específica de reproducción, ya que puede aparearse en cualquier momento del año. Las camadas suelen tener entre uno y seis cachorros, y el intervalo entre nacimientos es de al menos 18 meses. La madre es la única encargada de la crianza, buscando lugares seguros como cuevas o grietas cercanas a fuentes de agua para dar a luz.

Los cachorros comienzan a alimentarse de carne entre las 6 y 8 semanas de vida, y a los 2 o 3 meses ya siguen a su madre. Permanecen junto a ella hasta los 1,5 o 2 años, mientras desarrollan gradualmente sus habilidades y resistencia. Durante este periodo dependen mucho de su madre, pero poco a poco se vuelven más autónomos.

 

Estado de Conservación y Amenazas


El leopardo persa está en peligro de extinción, con una población silvestre estimada entre 870 y 1300 ejemplares. Debido a su estado crítico, figura en el Apéndice de la CITES y en el Libro Rojo de varios países, lo que le otorga protección legal y conservación de su hábitat.

Sus principales amenazas son la pérdida de hábitat por expansión humana, la caza ilegal que se intensificó en el pasado por ataques a personas, la competencia con otros grandes depredadores y la escasez de presas. Estas condiciones exigen medidas urgentes de conservación para evitar su desaparición.




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